¿Ficción que supera la realidad o realidad que supera la ficción? en TNT

(A Propósito del estreno de “Los Borgia”)

Pasiones, intrigas y traición, se conjugan en la nueva serie «Los Borgia» (The Borgias), nominada al Golden Globe® y ganadora de un Emmy®, que este jueves 07 de junio estará estrenando la pantalla de TNT.

Protagonizada por Jeremy Irons – Oscar® por Reversal of Fortune-   con guión, dirección y producción ejecutiva, respectivamente,  de Neil Jordan (Oscar® por The Crying Game) y Michael Hirst (The Tudors), «Los Borgia» es una serie con intrigas palaciegas, traiciones, ambiciones desmedidas y toda la historia de una de las familias más poderosas del Renacimiento. La primera temporada de esta co-producción entre Irlanda, Hungría y Canadá estará al aire cada jueves a las 9.30p.m. en la pantalla del canal, finalizando el 2 de agosto. Se destaca la opción de audio SAP para los que deseen escuchar la serie en idioma original.

El primer capítulo ubica al espectador en el siglo XV,  cuando Rodrigo Borgia (Jeremy Irons), utilizando su ausencia de escrúpulos logra llegar al papado para suceder a Inocencio VIII. Se le conocerá en el mundo cristiano como Alejandro VI, y su patriarcado, iniciado en 1492, significará un período oscuro para la Iglesia Católica en Roma.

Para mantenerse en el poder y asegurar la fortuna e influencia la  familia deberán luchar contra todo aquel que consideran un enemigo.  El Papa no estará solo, lo secundan, al mejor estilo de la mafia,  sus hijos Cesare (François Arnaud, I Killed My Mother) y Juan (David Oakes, Pillars of the Earth), y su hija Lucrezia (Holliday Grainger).

La primera temporada son 9 capítulos de una hora de duración, que serán retrasmitidos los días jueves al término de la emisión original, y martes al término de TNT Movie Club (pasadas las 11.30p.m.)

Este es el trailer de la serie (en inglés)

¿Eran Los Borgia una familia mafiosa?

 El slogan de TNT es «pasa en la vida, pasa en las películas pasa en TNT», pero eran  Los Borgia tan malos como se les pinta?

La historia sobre Los Borgia menciona que «fueron una noble familia valenciana (Borgia es la italianización del apellido Borja) que a finales del siglo XV estuvo a punto de someter media Italia al poder de la Santa Sede y convertirla en una pseudo-monarquía hereditaria. Hoy en día Italia es una unidad, pero en el renacimiento era un puzzle de ducados, repúblicas y reinos. Tres fueron los miembros de la familia que han pasado a la historia: el Papa Alejandro VI (Rodrigo Borgia), y sus hijos César y Lucrecia».

Nacido en 1431 en Valencia, Rodrigo Borgia se inició en la milicia, pero fue llamado a Roma por su tío Calixto III, quien lo nombró cardenal y vicecanciller de la Iglesia. Por esa época vivía con Rosa Vanozza, con la que tuvo cinco hijos (tuvo también otros, con otras mujeres). Los más célebres fueron Luis, duque de Gandía, casado con una hija del rey de Nápoles; César, duque de Valentinois y par de Francia, y Lucrecia, casada cuatro veces con príncipes de Pésaro, Milán y Nápoles.  Muerto Calixto y tras los pontificados de Pablo II, Sixto IV e Inocencio VIII, Rodrigo fue elevado a la silla de San Pedro el 2 de agosto de 1492. Para alcanzar ese puesto compró votos del consejo cardenalicio, prometió palacios, dignidades y rentas. Pero apenas coronado comenzó a deshacerse de quienes lo habían votado, que fueron perseguidos o asesinados.

Mario Puzo, fallecido autor neoyorquino, con la ayuda de su compañera sentimental Carol Gino, recreó con “Los Borgia” las peripecias familiares con la figura de un patriarca manipulador en la cúspide de la jerarquía. Algo que ya había realizado en un escenario muy diferente con su obra más famosa, “El Padrino”.

La novela de Puzo «Los Borgia»  está ambientada en pleno Renacimiento, época de ebullición política y artística que da lugar a apariciones en la novela de personajes históricos como Miguel Ángel o Maquiavelo, este título fabula sobre las andanzas del corrupto papa Alejandro VI/Rodrigo Borgia, de origen español, y sus hijos César, Lucrecia, Juan y Jofre.

Las críticas que se le hacen al libro se basan en que, al parecer, los autores «intentan humanizar en sus motivaciones y actitudes otorgándoles una dimensión mayor que en otros relatos o estudios históricos sobre la afamada parentela. Llama la atención el ansia del autor italiano por exaltar a Lucrecia Borgia, alejándola de su usual y pérfido retrato histórico y exhibiéndole como víctima utilizada por sus parientes».

Sobre este libro,  en Internet hay foros que halagan o destruyen la intención de Puzzo, y por ejemplo un lector – identificado como Kleer – alega que es «entretenido pero con bastantes dudas sobre su veracidad histórica, los personajes de la novela me parecen un poco planos y poco desarrollados casi no se profundiza en sus verdaderos sentimientos e inquietudes. Es más un guión cinematográfico que una novela. Lo que importa más es la trama y los continuos acontecimientos históricos. El libro que en cierto modo pretende escandalizar sobre las costumbres de esta familia no sé si lo logra ya que todo parece muy justificado por las circunstancias y por lo que conocemos de los monarcas de la época, Los Reyes Católicos, Enrique VIII, Maximiliano de Austria… ninguno se andaba con chiquitas».

Uno de los temas que más destaca dentro de esta familia, además de los asesinatos y las intrigas, tiene que ver con las relaciones sexuales. «Lucrecia se había casado con Giovanni Sforza para sellar una alianza que luego se hizo inconveniente. Cuando las intrigas de su padre y su hermano consiguieron anular su matrimonio, se enfadó y se encerró en el convento de san Sixto, donde sólo recibía a un poeta español, Pedro Calderón, llamado Perotto. Estando allí nació Giovanni, el infans romanus. ¿Quién fue en realidad su padre, a pesar de que Perotto se presentó como tal? Porque la gente pensaba que podía ser hijo de César o del mismo Alejandro quien, por cierto, le reconoció como tal, aunque todo el mundo sabía que era para asegurar sus derechos a la herencia familiar, cosa que consiguió como duque de Neppi y de Camerino. No hay documento ninguno, pero autores como Víctor Hugo o Apollinaire –La Roma de los Borgia–, afirman que el incesto fue frecuente en la familia».

Pero como todo lo que sube debe bajar, y como dice el refrán: «El que a hierro mata no puede morir a sombrerazos», el final de la dinastía Borgia también tuvo su cuota de tragedia y tras la muerte de Alejandro VI (1503), probablemente envenenado por su sucesor Pío III, su hijo César -personaje en el que se inspiró Maquiavelo para escribir El príncipe- huyó a Viana (Navarra) y murió combatiendo junto a su cuñado, el rey navarro Juan III de Albret. Mientras, su hermana Lucrecia continuó la labor de mecenas de su padre en Ferrara.

Lo cierto es que durante el papado de Alejandro VI  la actividad de mecenazgo fue muy importante y alcanzó a artistas tan famosos como Miguel Ángel, Tiziano o el Bosco, que fueron protegidos en algún momento de su vida artística por los Borgia. A esta protección debemos algunas de sus obras más conocidas. El mecenazgo más importante que realizaron los Borgia fue el del pintor, inventor, y científico Leonardo da Vinci, el cual diseñó numerosas máquinas de guerra para el ejército papal.

Los apellidos Borgia y Borja se diluyeron en la historia, hasta que en el XIX, los románticos franceses utilizaron su leyenda para presentarles como la “primera familia del crimen de la historia”, algo que si uno estudia la historia verá que es exagerado porque basta con ver lo que ocurrió con los emperadores romanos.

Aún hoy la vida, obra y trascendencia de Los Borgia sigue siendo tema para los escritores y así tenemos que existen ensayos como el de Joan Francesc Mira, del 2000, titulado «Los Borja, familia y mito» (Els Borja. Família i mite); novelas como  «Los Borgia» (1958) de Jean Plaidy,  «Borja Papa» (1996) de Joan Francesc Mira, «O César o nada» (1998) de Manuel Vázquez Montalbán y «Los Borgia» (2001)  de Mario Puzo. Además, el tema de esta familia ha sido inspiración para  Comics como «Los Borgia» (2006), con Alejandro Jodorowsky, como guionista, y Milo Manara, como dibujante, Cesare (2005) Shojo manga que narra la adolescencia de Cesar Borgia durante su estancia en la Universidad de Pisa,  Cantarella (2001) Shojo manga de corte fantástico, recopilado en 12 tomos que tiene como protagonista a Cesar Borgia, así como  Videojuegos con la Saga de juegos de ciencia-ficción de «Assassin’s Creed» donde  aparecen varios personajes de esta familia destacando los mitos de su leyenda negra y haciendo que cualquier parecido con la realidad sea pura coincidencia ya que se ciñe a la ficción creada por la saga.

El cine también ha encontrado en Los Borgia material para una extensa filmografía entre la que se encuentra: «Lucrezia Borgia» (1910) primera película cinematográfica, con Vittoria Lepanto (Lucrecia) y Achille Vitti (cesar) como los dos primeros actores que encarnan en la gran pantalla a la familia Borgia; «Lucrezia Borgia» (1926);  «Lucrèce Borgia», película francesa (1935); «El Príncipe de los zorros» donde Cesar Borgia era interpretado por Orson Welles (1941);   «Lucrecia Borgia», film de parodia argentina (1947); «La máscara de los Borgia» protagonizada por Paulette Goddard (1949);  «Cuentos inmorales» (Contes Immoraux), producción francesa de corte erótico donde un capítulo se dedica a los incestos de Lucrecia con su padre y su hermano. (1974); «Los Borgia» serie de la BBC (1981) «Los Borgia», película española dirigida por Antonio Hernández (2006);  «Assassin’s Creed: Lineage», miniserie de ficción donde aparece Rodrigo Borgia (2009);  «The Borgias» serie dirigida por Neil Jordan (2011); «Borgia» serie creada por Tom Fontana (2011); «Horrible Histories Tv Series», serie infantil, aparecen en el episodio 9 de la cuarta temporada (2012).

¿Ficciones que se basan en la realidad?, ¿Imaginación de escritores y directores que superan los hechos reales? Sea cual sea la verdad, este es un tema que sigue generando opiniones y la posibilidad de continuar explorando el pasado para ajustarlo o asociarlo con la actualidad, por aquello  de que el «hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra» o para evitar que «si no conocemos el pasado estamos condenados a repetirlo» si es que acaso ya no lo hemos hecho, repetidas veces… O esa es mi Visión Particular.